Castelldefels

Castelldefels es una ciudad ubicada en la comarca del Bajo Llobregat, en la provincia de Barcelona y cercana a la ciudad condal. En 2020 contaba con 67460 habitantes.

En su origen el municipio eran solo unas cuantas masías dispersas, hasta que se popularizó el uso del automóvil y la ciudad de Barcelona vivió su desarrollo económico. Entonces, muchos barceloneses vieron en esta ciudad el lugar perfecto para veranear. El nombre proviene de Castrum Felix, de la época romana. Después pasó a llamarse Castello de Feles, y finalmente, Castelldefels.

Lugares de interés

La ciudad de Castelldefels tiene miles y miles de años de historia que se simbolizan muy bien en la figura del Castillo. Este castillo se encuentra en el punto más alto de una de las colinas, entre el macizo del Garraf y Barcelona. El castillo como tal data del siglo XVI, aunque la iglesia románica de su anterior pertenece al X. Se utilizó durante años contra los ataques de piratas berberiscos y las invasiones árabes. Manuel Girona fue quien se encargó de rehabilitarlo en 1897, permitiendo así el inicio de su proceso de recuperación. Actualmente se puede visitar y en su interior se celebran varios acontecimientos.

La Iglesia de Santa María es otro de los elementos del patrimonio destacados de esta localidad. Con el paso del tiempo, el aumento de número de veraneantes y un incendio sufrido en la Guerra Civil, esta iglesia tuvo que reconstruirse. Entre el arquitecto Nilo Tusquets y el pinto Serra Santa lograron una iglesia diferente. En su interior se pueden ver pinturas sobre algunos de los pasajes del Nuevo Testamento y el Misterio del Rosario.

A lo largo de todo Castelldefels se encuentran torres vigía. Estas torres se construyeron hacia la mitad del siglo XVI para vigilar las incursiones de piratas. Actualmente quedan 12 en pie y hacer un recorrido por la ciudad buscándolas es una buena opción, aunque no se pueden visitar por dentro. Así como las torres, las masías también se reparten por toda la ciudad. Estas masías son construcciones rurales típicas catalanas. Tres de ellas sí se pueden visitar al ser propiedad municipal.

Por otro lado, el patrimonio natural de la zona es también muy rico. El Parque Natural del Garraf ofrece multitud de actividades y rutas en sus colores. En el centro del lugar se puede visitar el Palau Novella, el primer monasterio budista de Cataluña. Su arquitectura es ecléctica y en su interior existe una exposición de arte y cultura urbana tibetana. Por supuesto también se pueden atender talleres de relajación y muchas otras actividades relacionadas con la conexión con uno mismo.

Playas

La playa de Castelldefels se divide en tres: la de la Pineda, la de Lluminetes y la del Apeadero. Aunque todas ellas hacen una sola playa de 5 km de longitud perfecta para realizar cualquier tipo de actividad que involucre el agua del cálido Mediterráneo.

Estas playas cuentan con un montón de servicios para todo rango de población y distintos de calidad. Además, tiene la Certificación de Turismo sostenible.

Fiestas

San Jordi, la Castañada, carnavales, las fiestas de los barrios, de la música en la calle y las Fiestas del Mar, además de las mayores tanto de invierno como de verano, conforman el calendario festivo de Castelldefels.

En las Fiestas del Mar se celebra el ataque a los piratas, un espectáculo que narra cómo la ciudad tenía que mantenerse en pie tras las embestidas de estos. Se suelen celebrar alrededor de la mitad de julio.

Gastronomía

Las recetas más tradicionales son las cocas, caracoles o escalibadas. La gastronomía de Castelldefels es uno de sus puntos fuertes. El marisco se utiliza para muchos de sus platos, así como el pescado.

El pota blava también es un elemento muy característico de su cocina. Se trata de un pollo autóctono que se consume tradicionalmente para Navidad.